Absentismo escolar y COVID-19
Ante el nuevo curso escolar los centros deben garantizar la asistencia presencial del alumnado mediante el cumplimiento de los protocolos de seguridad establecidos por las autoridades autonómicas mediante, básicamente, medidas de desinfección, detección precoz, creación de grupos burbuja, mantenimiento de la distancia de seguridad en las aulas, fomento de las clases al aire libre o en espacios más grandes, reducción de alumnos por aula y la contratación de más profesores por alumno o limitación de contactos, entre otros.
Esta situación lleva a que muchos padres con hijos entre 6 y 16 años tengan dudas sobre la idoneidad y/o suficiencia de estas medidas y, sin duda, la incertidumbre de la situación de la pandemia acrecienta la polémica.
Ahora de ahí a plantearse el absentismo escolar como una vía de actuación media un mundo ya que la situación actual no implica incumplir con el deber legal de escolarización de los menores, tanto según la legislación estatal como la autonómica que, en caso de reiteración grave y después de una moderada ponderación, puede acarrear un serio problema legal a los padres ya que podría en los casos extremos comportar la apertura de diligencias de investigación por la Fiscalía que conllevaría aparejadas, en los casos más recalcitrantes, el ejercicio de acciones penales contra los padres o tutores por infracción de los deberes inherente a la patria potestad.
Os dejamos el enlace a la nota de prensa publicada por la FGE:
‘El Fiscal de Sala de Menores unifica los criterios de las secciones de menores de las fiscalías provinciales en materia de absentismo escolar derivados de la crisis de la COVID-19’
